Indiferentemente de cuál sea el tipo de empresa de la que se trate, la innovación debe ser una constante. Sin embargo, dependiendo del tipo de producto o servicio que cada empresa ofrezca, se deben trazar las pautas para llevar a cabo el proceso de innovación.
En vez de hacer frente a cada situación a medida de que estas ocurran, es mucho más conveniente estar alerta y preparados a lo que pueda pasar. Es importante ofrecerle al consumidor la suficiente confianza para lograr que sea fiel a nuestra marca y negocio. Si no tienes muy claro lo que debes hacer para innovar y mantener tu empresa bien posicionada, toma en cuenta las siguientes recomendaciones:
1. Nuevas generaciones
Estamos viviendo una era de automatización. Los productos y artefactos electrónicos que utilizamos tienen la opción de ser controlados por nuestra voz. Solo debemos indicarles cada comando y estos realizarán las tareas que les solicitemos.
2. Realidades Viruales
Es muy común encontrar cada día usuarios que son parte de una plataforma de masificación de Realidad Aumentada o Realidad Virtual. La manera en la que cada uno de los usuarios se comunica entre dos realidades se evidencia en aplicaciones como Pokémon Go.
3. Apertura sensorial
Existe una nueva tendencia de consumidores llamados ‘early adopters’, quienes procuran experimentar distintas sensaciones a través de los olores, colores y espacios a los que están expuestos.
4. Tecnología y salud
A través de distintas tecnologías y del uso de dispositivos que permiten monitorizar los niveles vitales o programas que regulen la ingesta diaria de calorías, la innovación juega un papel fundamental en el sector de la salud.
5. Diferencia de clases
Dado el recurrente incremento al acceso bancario y la facilidad de muchas personas para pagar las cuentas con tarjetas de crédito, muchos consumidores están dispuestos a adquirir nuevos productos y a probar las nuevas opciones que las empresas les presenten.
6. Bienestar común
Se deben definir objetivos que vayan en pro del beneficio de todos los sectores. Es decir, ofrecer una solución a los problemas que todos viven cada a día como la contaminación o la inseguridad. Al momento de lanzar un producto al mercado hay que procurar que este sea auténtico y que sea justo con los distintos grupos sociales.
7. Colaboración
Los mejores resultados ocurren cuando distintas personas participan en el proceso creativo. Por tal razón, se debe involucrar al proceso de innovación a universidades, agencias de diseño e institutos gubernamentales, los cuales pueden aportar sugerencias desde distintas perspectivas.
8. Pruebas antes de lanzar el producto
Cuando se lanza un nuevo producto, se debe estar completamente seguro de que este cumple con los requisitos para ser aceptado por el público consumidor. Antes de lanzar el producto de manera oficial, se puede lanzar exclusivamente en algunas zonas de importancia para medir cuál es la aceptación que tiene entre los usuarios. Esta es una de las técnicas de mercadeo recomendada por los expertos.
9. Evaluación de distintos proveedores
Mientras más opciones se tengan en la búsqueda de la calidad, más fácil será encontrarla. Por tal motivo, es recomendable realizar una investigación exhaustiva entre lo que nos ofrecen los distintos proveedores tales como consultoras y agencias.
10. Cero frenos a la creatividad
En el momento de aportar nuevas ideas no debemos limitarnos a nada, siempre y cuando cada aporte sea verdaderamente beneficioso para el proceso de innovación. Las estrategias se deben enfocar en función de consolidar nuestra marca en el mercado.
11. Multidisciplinas
No existen barreras en el mundo de la innovación. Cada profesional o experto de un área específica tiene las herramientas necesarias para lograr impulsar su negocio. Incluso se debe aprovechar lo que cada uno de estos puede aportar desde su punto de vista particular.
12. Fuentes de inspiración
Para algunos gigantes empresariales aún es necesario revisar cada proyecto desde que está en la fase de creación. Podemos pensar que para las grandes empresas el éxito está ya garantizado, pero lo cierto es que nadie debe permanecer nunca en su zona de confort.