Si hablas con un diseñador gráfico lo primero que comentará es la fuente usada y hará sus pertinentes comentarios. Yo me decanto más por el naming: el arte de llamar a las cosas, que de esto bien sabe el nombrador Fernando Beltrán. La búsqueda de la palabra justa dará pie a una nueva marca (o serie). Una necesidad, la de dar nombre, tan antigua como la humanidad.
Pero estamos en la actualidad, cerrando literalmente el año. Seguro que a todos nos quedan series por comenzar o temporadas por terminar. Disfrutamos viendo capítulo tras capítulo hasta altas horas y nos gusta alternar series. Hoy hacemos balance para recordar algunas de ellas más o menos recientes que nos han marcado y que recordaremos sin duda por su tipografía, letras más contundentes o agresivas, clásicas o elegantes, cursis o rompedoras.
La identidad visual como marca y transmisora de información e ideas es el tema que quiero tratar en este artículo. Porque tan importante es lo que se dice como la forma en la que se dice.
Obvio es que la omnipresente Helvética, tipografía suiza, es la más usada entre las series más famosas de TV. Serán su neutralidad y versatilidad por la que la eligen mayoritariamente. Todos recordamos, con solo citar el nombre de sus series, las tipos de Anatomía de Grey, Mad Men, Gosip Girl o Modern Family.
Pero hay vida más allá de la Helvética, porque la Arial MT Bold ha catapultado Breaking Bad y la ITC counduit Boild se ha hecho con True Detective.
El diseñador escocés que da nombre a la tipografía Rennie Mackintosh, considerado uno de los máximos exponentes del Art Nouveau en su país, ha abanderado American Horror Story.
Para Dexter se eligió una más original, la Soda Script Bold, de 1955.
Impact, diseñada por Geoffrey Lee en 1965, ocultaba las vivencias de Lost.
Y la Mobsters creada por Dennis Ludlow fue usada para el clan familiar de Los Soprano.
Tipos (y series) para todos los gustos. Otra noche que nos acostamos sabiendo algo más.
¡Por muchas Noches Buenas! ¡Feliz Año Nuevo, lectores!